Linda Evangelista se recuperó de los problemas de salud que sufrió por someterse a un tratamiento estético, el cual ella misma admitió la dejó “brutalmente desfigurada”, pero desde aquel desafortunado evento no ha vuelto a ser la misma.
En una reciente entrevista, la exmodelo de 58 años confesó que ya no se mira en el espejo, y también que no tiene ningún interés en retomar su vida amorosa.
“Ya no quiero acostarme con nadie. No quiero oír a nadie respirar”, dijo, según The Sunday Times.
También confesó que su última cita fue en el 2016, antes del tratamiento de congelación de grasa al que se sometió y que le provocó una hiperplasia adiposa paradójica. Tras esta situación vivió un proceso de depresión que la llevó permanecer encerrada por un largo tiempo.
“No me miro al espejo. Mi hijo a veces me dice: ‘Tal vez quieras saber que tienes un grano en la barbilla’. Pero la vida es mejor sin espejos. Bueno, ya no me culpo. Ya no soy dura conmigo misma”, contó.